Prepárate para pasar un fin de semana de mucha aventura en las aguas de Ixtapa, las mejores del país para practicar deportes acuáticos.

De entre las nueve playas que componen la bahía de Zihuatanejo, La Ropa es de las imperdibles si buscas empezar con adrenalina. El viento en esta playa es perfecto para hacer jet ski, una mezcla de surf con motocross sobre las olas, para los que quieren sentir el corazón a todo lo que da. Volar como un pájaro sobre el océano en parapente o practicar windsurf son otras buenas opciones para pasar el día.

A lo largo de la playa encontrarás palapas donde se cocina la pesca del día. Deja que te guíe el estómago y siéntate a comer en cualquiera de ellas para probar la verdadera gastronomía de la costa.

Para dormir, si vas en plan de celebrar, está La Casa que Canta, un hotel de lujo en el que vas a experimentar un nuevo nivel de descanso después de pasar todo el día en el mar. Una versión un poco más relajada, pero también con excelente atención, es Lo Sereno, en la vecina playa de Troncones.

Al día siguiente —y completamente descansado— ve a la playa Contramar, a poco más de 10 minutos del centro de Ixtapa. Se trata de una playa alejada del caos de la zona turística. Las aguas son tranquilas pero rocosas, por lo que se necesita ser muy hábil en el arte de los clavados.

Si todavía te queda pila después de nadar, entonces tienes que recorrer la ciclopista de Zihuatanejo. Se divide en dos secciones, con muchos atractivos en el camino: la marina, un club de golf, la reserva ecológica Aztlán y algunos viveros. Se trata de un circuito inmerso en la naturaleza, único y también desafiante.